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El Estado de las Autonomías como modelo organizativo del Estado ha implicado crear la oportuna estructura de financiación que permita a cada nivel de gobierno (estado, comunidades autónomas y Corporaciones Locales) hacer frente a sus necesidades de gasto con autonomía financiera y de gestión. En el ámbito académico esta estructura se conoce con el nombre de federalismo fiscal. Por tanto, una primera cuestión clave del federalismo fiscal es hacia qué modelo de estado se quiere ir.

La financiación autonómica, por su parte, debe asegurar que las comunidades autónomas dispongan de suficientes recursos financieros, es decir, tributos y subvenciones de nivelación. Las comunidades donde los ciudadanos hacen un esfuerzo fiscal lógicamente deben disponer de más recursos, y al mismo tiempo, las subvenciones de nivelación deben permitir la suficiencia financiera de las comunidades con menos recursos. El objetivo es combinar suficiencia financiera y responsabilidad fiscal.

Por otra parte, la actuación del estado genera también importantes flujos financieros entre territorios. Dónde y cuánto invierte y gasta el estado sin duda también es relevante para el desarrollo económico de las comunidades y el bienestar de la ciudadanía.

Estos aspectos clave del federalismo los tratarán destacados especialistas nacionales e internacionales con el fin de ofrecer un análisis riguroso y plural.