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Durante las dos últimas décadas, América Latina ha tenido avances destacados en materia educativa: el analfabetismo se ha reducido de 15 puntos porcentuales, la expansión educativa ha llegado a la enseñanza primaria y secundaria y ha facilitado el acceso a la educación de colectivos tradicionalmente excluidos del sistema. Sin embargo, en América Latina la expansión educativa parece repercutir muy poco en la reducción de la desigualdad educativa y social. Así, los mismos datos revelan que hay cerca de 30 millones de analfabetos y 100 millones de personas que no han logrado terminar la educación primaria. Mientras las clases altas tienen una media de escolarización cercana a los 12 años, similar a la de los países desarrollados, el 20% más pobre no llega a permanecer cuatro años en la escuela. Cuanto más grandes son las exigencias de escolarización, mayores son también las dificultades para que los grupos menos favorecidos accedan a más y mejor escuela.

La última década ha sido testigo tanto de estas limitaciones como del ensayo de nuevas políticas y reformas educativas dirigidas a mejorar la equidad y la calidad de la educación en América Latina. Este curso analizará los obstáculos para el pleno desarrollo educativo de la región y sus efectos y limitaciones sobre el desarrollo social, así como las principales políticas educativas llevadas a cabo y las razones que nos puedan explicar su éxito o fracaso.

Por ello, el curso reunirá a destacados especialistas y conocedores de la realidad educativa latinoamericana, los que más allá de su capacidad de diagnóstico analizarán de forma prospectiva el futuro de la educación en América Latina.